miércoles, 24 de abril de 2013

La salut dels nostres fills...


Evitar el sobrepeso de tus hijos es posible: claves para una vida saludable

Claves para una vida saludable
El 45 por ciento de los niños españoles, casi uno de cada dos,padece exceso de peso. Una ‘pandemia’ en palabras de la asesora de la Estrategia Naos para la Nutrición, Teresa Robledo, que puede evitarse con un cambio en los hábitos de vida y es aquí donde la familia juega un papel fundamental. 

Para ayudar a padres y también a educadores en la tarea de estimular a los más pequeños en esta transformación, los Ministerios de Sanidad y Agricultura, en colaboración con la Fundación Mapfre han presentado el nuevo plan "Vivir en Salud" que incluye un decálogo de hábitos saludables.

Estas son las normas fundamentales que deben seguir tus hijos para evitar la obesidad y mejorar su calidad de vida:

-Imprescindible cinco comidas al día, de esta forma se controla mejor el apetito y se regula mejor el nivel de azúcar en sangre. El desayuno, la comida y la cena deben hacerse sentados.

Beber 8-10 vasos de agua al día. Se puede elegir entre agua, zumos naturales de frutas o leche y se deben evitar las bebidas con gas. Los refrescos azucarados han de tomarse de manera ocasional.

 -Deben comer de todo. Una dieta variada, en cantidades adecuadas, es la base de una buena alimentación. Si a los niños no les gusta determinado alimento debe usarse la creatividad para hacerlo atractivo. Preparar la comida con tus hijos o ir juntos a la compra es otra forma de aprendizaje. 

 -Tienen que realizar una hora de actividad física todos los días y actividades de fuerza y flexibilidad dos o tres días por semana. Para que sea beneficiosa debe estar planificada, ajustarse a a las características del menor y tener una finalidad marcada.

 -Aprovechar el tiempo libre para hacer ejercicio y jugar con familiares y amigos. Se trata de organizar actividades de ocio que eviten el sedentarismo.  

 -Dedicar menos de dos horas diarias a los juegos de ordenador, internet y a la televisión.
  
-Deben proteger su espalda sentándose bien y llevando correctamente la mochila, para los niños más pequeños se recomiendan las que llevan ruedas porque su capacidad muscular es menor.
  
-Acostarse temprano y procurar dormir de 8 a 10 horas. El descanso influye decisivamente en cómo va a sentirse la persona.

-Hay que recordarles que tienen que ducharse a diario, cepillarse los dientes tres veces al día y lavarse las manos antes de comer y después de ir al servicio.

-En definitiva, deben cuidar su salud para estar sanos y fuertes.

Para más información:

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Estaría bé... pero que molt bé!!

SANIDAD PROPONE
Una hora más de deporte en el colegio
28 de noviembre de 2012 
La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, ha propuesto implantar una hora de ejercicio diario en el calendario escolar para reducir la incidencia de la obesidad y el sedentarismo en los menores.
El anuncio se produjo -recoge Efe- durante la entrega de la quinta edición de los Premios NAOS a la Nutrición, Actividad Física y Prevención de la Obesidad, en la que Mato adelantó también una nueva regulación de la publicidad de alimentos y bebidas dirigidas a menores de edad.
El 45 % de los niños de menos de 16 años sufren sobrepeso. Respecto a los adultos, el 38 % padecen este problema y el 16 % tienen obesidad, según las últimas estadísticas del ministerio.
«El exceso de peso se detecta en mayor proporción entre los menores de las familias más vulnerables», recordó Mato.

domingo, 11 de noviembre de 2012

ACTIVIDAD FÍSICA-ESPERANZA DE VIDA


La actividad física aumenta la esperanza de vida en hasta 4,5 años
Incluso las personas con sobrepeso viven más si hacen algún tipo de ejercicio de manera regular
 06/11/2012 - 23:01h
El ejercicio físico alarga la esperanza de vida, según un estudio GYI
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Madrid. (EP).- La actividad física durante el tiempo libre está asociada con una esperanza de vida más larga, de hasta 4,5 años, e incluso a niveles relativamente bajos de actividad y de peso corporal, según estudios realizados por un equipo de investigadores dirigido por el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos.
Además, se vio que las personas que hacen ejercicio físico regular, como caminar a paso ligero, viven más tiempo que los que no hacen ninguno, incluso cuando tienen sobrepeso.
Los análisis, publicados esta semana en PLOS Medicine, analizaron los datos de más de 650.000 adultos, en su mayoría con edades superiores a los 40 años.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos recomienda una actividad aeróbica de 2,5 horas de intensidad moderada (la que permite hablar pero no cantar cuando se realiza el ejercicio) a 1,25 horas con un nivel vigoroso (se pueden decir sólo unas pocas palabras sin detenerse a recuperar el aliento) a la semana para los adultos de 18 a 64 años.
Tras considerar otros factores que podrían afectar a la esperanza de vida, los investigadores concluyeron que ésta fue de 3,4 años más para las personas que consiguieron el nivel recomendado de actividad física, mientras los individuos que realizaron el doble de esfuerzo a los ejercicios aconsejados ganaron 4,2 años de vida.
Incluso, se detectaron beneficios en los niveles más bajos de actividad: los que hicieron la mitad de la cantidad de actividad física recomendada añadieron 1,8 años a su vida. "Nuestros resultados ponen de relieve la importante contribución que el tiempo libre dedicado a la actividad física en la edad adulta puede otorgar a la longevidad. El ejercicio regular prolonga la vida en todos los grupos examinados, con peso normal sobrepeso u obesidad", dijo el autor principal del estudio, el doctor Steven Moore, de la División de Epidemiología del Cáncer y Genética del Instituto Nacional del Cáncer.
Los autores examinaron también cómo la esperanza de vida cambió con la actividad en personas con obesidad: las personas que eran obesas e inactivas tenían una esperanza de vida que era entre cinco y siete años menor que las personas que tenían un peso normal y actividad moderada.
Así, las personas que hacen actividad física regular, como caminar a paso ligero, viven más tiempo que los que no hacen ningún ejercicio durante su tiempo libre, incluso cuando tienen sobrepeso, con mejorías en todos los niveles de índice de masa corporal (IMC).
Los resultados determinan que la actividad física en un nivel equivalente a caminar a paso ligero durante 75 minutos a la semana se asoció con un aumento promedio de la esperanza de vida de 1,8 años, en comparación con aquellos que no hicieron ejercicio.
Sin embargo, la actividad física en el tiempo libre en el nivel recomendado por la Organización Mundial de la Salud (un mínimo de 150 minutos de caminata enérgica por semana) se asoció con un promedio de esperanza de vida de 3,4 a 4,5 años más que no hacer nada.




miércoles, 24 de octubre de 2012

HAY QUE COMER MEJOR Y HACER EJERCICIO

La edad media del paciente diabético ha bajado 20 años la última década

  • Los malos hábitos alimenticios y el sedentarismo están detrás de ese descenso
En España se estima que entre un 7% y 9% de la población padece diabetes tipo 2, siendo la edad media del paciente unos 40 años, 20 menos que hace 10 años, según ha constatado el informe 'La diabetes tipo 2 en España: estudio crítico de la población', elaborado por la Fundación Gaspar Casal con el apoyo de Novo Nordisk.
"Lo preocupante es que en diez años ha cambiado mucho el panorama", ha reconocido la doctora Alicia Coduras, una de las autoras de este estudio, que también ha puesto de manifiesto la falta de datos "fiables y exactos" que permitan cuantificar el número de afectados por esta enfermedad.
Y es que, según los estudios analizados, la incidencia puede variar entre un 7 y 9%, a los que habría que sumar un 4% más de la población que desconoce que padece diabetes, por lo que el porcentaje total de afectados podría estar en un 12% de la población.
Lo que ha puesto sobre el tapete el informe es el carácter inversamente proporcional de la prevalencia de la enfermedad respecto al nivel de estudios de los pacientes.
Asimismo, el número de obesos entre las personas con diabetes tipo 2 es más del doble que el de quienes no la padecen (35,5% frente al 15,9%). Igualmente, solo el 7,9% de los pacientes realiza semanalmente alguna actividad física intensa, frente al 22,4% del resto.
Por otro lado, los registros también muestran "enormes diferencias" entre unas comunidades y otras, siendo las ciudades de Ceuta y Melilla y Castilla y León las regiones con una tasa de afectados más alta, con un 13,6, 13,5 y 12,3% respectivamente.
Por contra, Cantabria (2,7%), Madrid (3,6%) y Cataluña (6,2%) son las comunidades con una menor tasa de diabetes tipo 2, aunque la falta de datos exactos sobre la enfermedad "impiden saber qué factores explican estas diferencias".
Por ello, según Coduras, es necesario poner en marcha un registro nacional de diabetes tipo 2, ya que ayudaría a conocer el alcance real de la enfermedad y "planificar mejor el modo de combatirla".
En este sentido, ha reclamado una recogida sistemática de datos epidemiológicos, de diagnóstico, de atención y de complicaciones de esta enfermedad crónica, cuya gravedad se incrementa cada año en nuestro país tanto en número de casos como de riesgos asociados a ella.

Malos hábitos

Lo que está claro, añade esta experta, es que uno de los principales motivos de su aparición y del hecho de que cada vez se esté dando en pacientes más jóvenes son los malos hábitos alimenticios y al sedentarismo.
Y es que actualmente, en España se estima que los índices de sedentarismo son ya superiores al 80%, mientras que el consumo de la dieta mediterránea "también es cada vez menor", según ha apuntado el doctor Manuel Aguilar, jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Puerta del mar de Cádiz y director del Plan Integral de Diabetes en Andalucía.
El problema, añade este experto, es que ambos factores son determinantes tanto para la aparición de la enfermedad como para su agravamiento.
De hecho, la diabetes es actualmente la primera causa de ceguera en España y también puede derivar en otras complicaciones como las enfermedades renales o las amputaciones de miembros inferiores. Además, sobre esta última, España es el segundo país desarrollado con más amputaciones del mundo, sólo superado por Estados Unidos.
Por todo ello, Aguilar ha reclamado que el abordaje de la diabetes haga especial hincapié en una "mayor y mejor prevención", centrada en el seguimiento de unos hábitos de vida saludables, ya que se ha demostrado que en un 50% de las personas de alto riesgo de padecerla se puede retrasar o evitar la enfermedad "sólo con un cambio en los estilos de vida".
En este aspecto, este experto ha pedido que la actual crisis económica no interfiera en el abordaje de la enfermedad, y ha recordado que ya hay estudios que muestran como la crisis griega está causando "efectos importantes en la evolución de enfermedades graves".
Además, como ha apuntado el director de la Fundación Gaspar Casal, Juan del Llano, el manejo adecuado de la diabetes resulta "coste-efectivo", de ahí la necesidad de que "la crisis y los ajustes no nos lleven a desinvertir en la enfermedad", ya que de lo contrario aumentarían las complicaciones y el coste de la enfermedad.
Y es que, según el director de Relaciones Institucionales de Novo Nordisk, Alfonso Rodríguez, "un paciente con complicaciones cuesta 2,4 veces más que otro que está bien controlado". "Es la mejor inversión para un país, a la hora de evitar gastos futuros y tener menos salud", ha concluido.

martes, 16 de octubre de 2012


Demasiada azúcar en nuestras bebidas
R.I.
Última revisión viernes 12 de octubre de 2012

Nueva York ha prohibido las bebidas azucaradas XL
Las bebidas azucaradas están «bajo sospecha» desde hace tiempo. En algunas ciudades de EE.UU., como Nueva York, están en el punto de mira como uno de los desencadenantes de la pandemia de obesidad. Ahora, tres investigaciones que se publican en The New England Journal of Medicine(NEJM), aportan nuevos datos que engrosan la lista de evidencias científicas que las señalan como uno de los factores más influyentes en el incremento de la obesidad entre los niños, adolescentes y adultos. Dos de los estudios, en los que se analizan los efectos de un programa basado en la reducción de la ingesta de bebidas azucaradas, proporcionan una sólida base científica para reclamar un mayor control en el consumo de bebidas azucaradas para tratar de revertir esta epidemia.
La obesidad se ha convertido en uno de los mayores retos de la salud mundial para el siglo XXI. Su aumento entre los niños y adolescentes es particularmente alarmante, dado que está íntimamente relacionada con complicaciones cardiovasculares y el desarrollo de diabetes tipo 2. España es, a nuestro pesar, uno de los países con una tasa más elevada de obesidad infantil: un 19% de niños obesos frente al 16% de los EE.UU., un porcentaje que triplica al de hace 30 años. Además, casi un 39% de la población adulta tiene sobrepeso y un 14,5% obesidad.
Se sabe que uno de los factores más determinantes en esta epidemia han sido los cambios en la nutrición. Y se considera que el aumento del consumo de bebidas azucaradas es uno de principales factores: en EE.UU. se han convertido en el primer alimento de aporte calórico –en algunos casos el 15% de la ingesta de calorías diarias se hace a través del azúcar que contienen estas bebidas y se calcula que los adolescentes consumen una media de 375 kcal por cada bebida-. Además, según el artículo publicado en NEJM, las bebidas azucaradas son pobres en nutrientes y, a menudo, se asocian con el consumo de alimentos salados y comidas rápidas. Y, lo más preocupante, dice Sonia Caprio, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale, es que se sabe que promueven enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, hipertensión y enfermedad coronaria.
Culpables
La publicación de estos tres nuevos trabajos parece señalar inequívocamente a los refrescos como uno de los culpables de esta epidemia. Uno de ellos, realizado en la Escuela de Salud Pública de Harvard, proporciona una fuerte evidencia de que existe una interacción significativa entre la ingesta de bebidas azucaradas y una predisposición genética a la obesidad y al riesgo de obesidad. El informe afirma que aquellas personas con una mayor predisposición genética pueden ser más susceptibles a los efectos adversos de las bebidas azucaradas, un claro ejemplo de la interacción entre genes y medio ambiente.
En los otros dos trabajos se describen los efectos de un programa diseñado para reducir el consumo de bebidas azucaradas y sus consecuencias sobre el peso en grupos de niños con peso normal y adolescentes con sobrepeso y obesidad. El primero, realizado en la Faculty of Earth and Life Sciences de Amsterdam (Holanda), analizó a 641 niños con peso normal a los que se controló desde los 4 a los 11 años. Aunque el 26% de los participantes no completaron el estudio, una limitación importante del trabajo, no obstante, los resultados sugieren claramente que la sustitución de una bebida que contiene azúcar (104 Kcal.) por una bebida sin azúcar redujo significativamente el aumento de peso y la acumulación de grasa en los niños con un peso normal.
Menos obesos
Por su parte, el ensayo de la New Balance Foundation Obesity Prevention Center (EE.UU.) asignó de forma aleatoria a 224 adolescentes con sobrepeso y/o obesidad a un programa en el que durante un año se sustituyeron las bebidas azucaradas por otras sin azúcar. Los datos mostraron que, aquellos que participaron en el programa, redujeron su índice de masa corporal.
En conjunto, los tres estudios sugieren que las calorías que aportan las bebidas azucaradas son importantes. Pero, no hay que olvidar, señalan, que no basta con una decisión política que limite el consumo de estas bebidas. La estrategia, dicen, debe ser global, y debe incluir otras líneas de actuación, como el fomento de la actividad física.


Los alumnos que no hacen la primera ingesta del día presentan un peor rendimiento físico y mental

CARLOTA FOMINAYACARLOTAFOMINAYA / MADRID
Día 27/09/2012 - 01.43h
Contra los suspensos, un buen desayuno

Niños dormidos encima de los pupitres, o que necesitan urgentemente un tentempié para poder proseguir con las clases, ... La realidad es que los alumnos que no desayunan de una manera completa y equilbrada presentan un peor rendimiento físico e intelectualy una menor capacidad de atención y concentración, según los profesores de Educación Primaria encuestados en el estudio «El desayuno y el rendimiento escolar» elaborado por Kellogg's. Los resultados de este informe son desalentadores. A pesar de las terribles consencuencias de no desayunar las notas, en nuestro país existe todavía un 10% de los niños de entre 6 y 12 años que no desayuna a diario. Y entre los que sí desayunan, un 8% no lo hace en casa, (sino bollería industrial en el coche, o por el camino), y un 15% desayuna solo, sin la supervisión de un adulto. «Afortunadamente, más de la mitad de los niños desayunan a diario en casa, o con sus padres o con toda la familia, que es el escenario más idóneo para desayunar», en opinión de los profesores.

Falta de hambre

Pero, ¿cuáles son los motivos que pueden llevar a un niño a no hacer esta primera comida del día? La encuesta señala que un significativo 70% de los niños que no desayunan no lo hace por falta de apetito. «Pero es normal que no tengan apetito, porque al levantarles con prisas y salir corriendo de casa al cuerpo no le ha dado tiempo a sentir la sensación de hambre», explica la doctora Margarita Alonso, doctora en Medicina con especialidad en Pediatría y especialista en aparato digestivo y nutrición. Lo que Alonso propone es, sencillamente, «despertar al niño antes para enseñarle a que tiene que aprender a desayunar con calma». De esta forma, añade, el pequeño tendrá al menos 10 o 15 minutos para hacer un desayuno equilibrado, que es aquel que contiene un producto lácteo, una pieza de fruta o zumo, e hidratos de carbono, a poder ser de lenta absorción.

La importancia del sueño

Claro que para eso, también hay que acostarles antes. La realidad es que más de la mitad de los niños entre 6 y 12 años confiesa levantarse con sueño. En este sentido el doctor Estivill, pediatra especialista en sueño y autor de libros como «¡Duérmete niño» y «¡A comer!», advierte que los niños españoles se acuestan un promedio de una o dos horas más tarde de lo que deberían hacerlo, lo que repercute en un sueño más corto y de peor calidad. «Y esto a causa de los horarios que seguimos en España, donde los horarios laborales terminan muy tarde y obligan a toda la familia a rutinas totalmente inadecuadas con respecto al sueño», señala.

Dormir es imprescindible para tener un día con un buen estado de alerta

Estivill además asegura que el sueño es «como un taller en el que se da una reparación física y psíquica, imprescindible para tener un día con un buen estado de alerta, capacidad mental para aprender conocimientos y energía para realizar todos los actos que la requieren. Entendiendo esta función de taller que realizamos durante el sueño, en esta franja de edad que va desde los 6 hasta los 12, los científicos nos indican que el número de horas ha de ser entre 10 y 11».

Los niños españoles no duermen lo suficiente

El estudio de Kellogg's constata que en torno al 40% de los niños de 6 a 12 años cena entre las 21:00 y las 22:00 horas durante el curso escolar, se acuesta entre las 22:00 y las 23:00 y se levanta entre las 7:00 y las 8:00 horas.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Actividad física

La gran mayoría de los españoles no hace suficiente ejercicio

  • Los andaluces son los más deportistas, al contrario que los canarios
  • Los expertos recomiendan cinco horas semanales de actividad física
Laura Tardón | Madrid
Actualizado viernes 10/02/2012 05:25 horas
Imagine una pastilla que ayude a prevenir enfermedades cardiovasculares, reduzca el riesgo de ciertos tipos de cáncer, disminuya el estrés y la depresión y refuerce las musculatura y los huesos. ¿La compraría? No es una entelequia, aunque tampoco una pastilla. Es el EJERCICIO FÍSICO, en mayúsculas. A pesar de sus innumerables beneficios, según una encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el 24% de los españoles no hace ningún tipo de ejercicio, ni siquiera camina una hora a la semana.

 
Según las recomendaciones oficiales, "lo ideal sería practicar una hora al día de ejercicio moderado/intenso durante cinco días a la semana", apunta José Luis López Sendón, jefe del servicio de Cardiología del Hospital La Paz de Madrid. "Hay quien no necesita actividad extra porque ya se mueve lo suficiente en su jornada laboral, pero a aquellos con trabajos sedentarios les conviene realizar algún tipo de actividad, la que más les guste".
Pocos cumplen con los consejos generales y así lo corroboran los resultados de la OCU. El 34% de los encuestados dedica menos de una hora a la semana, el 12% entre 60 y 150 minutos y el 30% más de 150 minutos. "Cada vez se hace una vida más sedentaria y esto se asocia al incremento de obesidad, hipertensión, diabetes, etc. El tipo de vida sedentaria conlleva una alimentación que supera a la que necesitamos, menor actividad física, mayor consumo de tabaco y, al final, todo esto se traduce en mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares".
¿Quizás tenemos menos tiempo? Dadas las respuestas de los 1.924 españoles encuestados, los responsables del artículo publicado en la revista 'Ocu Salud' aseguran que "no hacer deporte por andar demasiado ocupados es más una excusa que una realidad", ya que "los segundos más ociosos son también los más sedentarios".
Lo que sí influye en la práctica de ejercicio es el consumo de tabaco y la situación económica. Quienes fuman más de 15 cigarrillos al día se ponen menos el chándal y, por otro lado, el 53% de las personas que hacen más de 150 minutos de ejercicio a la semana declara una buena o muy buena situación económica.
La disponibilidad de instalaciones deportivas públicas tampoco parece ser un factor determinante. "En principio, el testimonio de nuestros encuestados no delata una carestía muy seria", afirman los autores. La mitad de los encuestados afirma tener a menos de 15 minutos de su domicilio un polideportivo, un campo de fútbol o una cancha de baloncesto municipal. El 46% cuenta con un gimnasio cerca y el 70% puede acudir al parque o al campo para hacer jogging.

Los canarios, los menos deportistas

Las diferencias por Comunidades Autónomas también son significativas. Los andaluces son los que más deporte practican (el 56% realiza más de 60 minutos a la semana), por delante de los castellanoleoneses (45%), gallegos (43%), aragoneses (41%) y asturianos (41%). Los menos deportistas, los canarios, por detrás de los murcianos.
Analizando sus respuestas, los autores han podido comprobar que el ejercicio mejora la calidad de vida tanto a nivel físico como mental. "Cuanto más tiempo se dedica a la actividad física, mejor se siente uno, con un salto notable entre los que no alcanzan la hora semanal de ejercicio y los que rebasan ese hito".
Tanto hombres como mujeres, independientemente de su índice de masa corporal, señala el doctor López Sendón, "los beneficios son los mismos. Viven más y mejor. El que hace deporte es más optimista, duerme mejor, tiene menos insomnio, más capacidad física, se puede desplazar más y disfrutar de más cosas sin estar limitado, disfruta de mejores relaciones sexuales...". Como explica el artículo de la OCU, la actividad física previene las enfermedades cardiovasculares (y sus factores de riesgo), reduce las probabilidades de infarto cerebral, el riesgo de algunos tipos de cáncer (aparato digestivo y mama), refuerza la musculatura y los huesos, rebaja los niveles de estrés y eleva la autoestima.
No es necesario dedicar estrictamente cinco horas semanales al ejercicio. Lo importante es que cada uno vaya superando poco a poco su actividad física, que haga lo que más le guste (jardín, caza,etc.) y aproveche para caminar en vez de utilizar el coche o subir y bajar las escaleras en vez de tomar el ascensor".
Como curiosidad, la encuesta también revela cuáles son las actividades deportivas preferidas por hombres y mujeres. Ellos se decantan por el ciclismo, el jogging, la natación y el fútbol; y ellas por el jogging, fitness, ciclismo, bailes de salón, yoga y pilates.